Es probable que el Liverpool FC sea uno de los cinco (¿o diez, tal vez?) clubes más destacados de la historia del fútbol mundial. Protagonista de grandes momentos deportivos como también de tristes historias. Por un lado, la final europea ante el Milan donde se recuperó de un 0-3 de la mano de Steven Gerrard y alcanzó su quinta Champions League en definición de penales. Por el otro, la tragedia de Heysel, en la final de 1985 frente la Juventus, donde una avalancha de hooligans mató a 39 hinchas italianos. O cuando cuatro años más tarde, 96 espectadores murieron aplastados en el estadio Hillsborough, en Sheffield.
Este club, que en los últimos años volvió a colarse en los principales titulares, posee una singularidad muy curiosa. Una canción llamada You’ll never walk alone fue creada en 1945 por dos músicos estadounidenses para una obra musical de Broadway y se ha convertido en el himno de los rojos. La frase que lleva el título de la canción fue incorporada al escudo de la institución y además está bordada en la cinta de capitán.
El Anfield en estado de euforia absoluta
When you walk through a storm
Hold your head up high
And don’t be afraid of the dark
At the end of the storm
Is a golden sky
And the sweet silver song of a lark
Walk on through the wind
Walk on through the rain
Tho’ your dreams be tossed and blown
Walk on, walk on
With hope in your heart
And you’ll never walk alone
You’ll never walk alone
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